El día 8, nuestro club recibió entradas para que pudiésemos asistir a la Caja Mágica y yo como todos los años no me pierdo la ocasión de verla. La verdad es que está muy bien, es impresionante y, si tienes suerte, puedes ver cara a cara a tus tenistas favoritos.
Salimos a las 10 de la mañana de Tres Cantos y llegamos sobre las 12 a la Caja Mágica. El primer problema que nos encontramos fue con los guardias de seguridad en la entrada, ya que nos comenzaron a registrar las mochilas con la intención de no dejarnos pasar ningún tipo de comida.
Como yo ya me imaginaba lo que iba a ocurrir, decidí esconderme la comida entre mi ropa y conseguí burlar la seguridad (yo diría más bien, la caradura de la organización que quiere cobrarnos 5,5 € por un sandwich y 3€ por una bebida), si bien nos hizo retrasarnos media hora.
Una vez dentro comenzamos por una zona llamada Garden que es donde entrenan o juegan partidos los jugadores y que además está rodeada de stands comerciales que intentan venderte cosas o bien que te regalan objetos promocionales.
En primer lugar, encontré en una pista a Rafa Nadal entrenando con Fernando Verdasco, con lo que mi sorpresa fue enorme y cuando terminaron todo el mundo se les acercaba para pedirles un autógrafo. Yo lo intenté y pude comprobar lo díficil que puede llegar a ser que Nadal te firme algo teniéndolo tan cerca, igualmente pude observar lo borde que es Verdasco que no quiso firmar a ninguno de los que estábamos por allí, no le costaba nada.
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